Tendencia eco amigable para la industria de envíos
La industria de envíos ha hecho frente a muchos conflictos debido a los altos costos y problemas de infraestructura. Sin embargo, una mirada a las posibilidades eco amigables que se avecinan puede llegar a ser la solución a todo esto.
La industria de envíos tiene una necesidad de modernizar la metodología que viene utilizando desde hace ya un tiempo. Medios más ecológicos de trasladar grandes cantidades de cargas se traducen en beneficios como reducir los costos de combustibles, lo que resulta en costos más bajos para operadores y clientes.
Estudios recientes estiman que embarcaciones de contenedores emiten 40 veces menos dióxido de carbón que un transporte aéreo o un camión de ruta. Las embarcaciones son más eficientes inclusive que los trenes y de cualquier otro transporte de carretera. Aun así, no llegan a ser lo necesariamente amigables con el ambiente, contaminando los mares y océanos con grandes cantidades de combustibles contaminadores.
Aunque ya se han demostrado mejoras para cumplir con las normas ambientales, las embarcaciones son a las que menos atención se les ha prestado. Un buque de carga tiene una vida útil de aproximadamente 25 años y teniendo en cuenta el crecimiento del impacto ambiental, muchos de ellos tienen que ser cambiados.
La dimensión y el peso de los buques de cargas son colosales. Solo sus motores pueden pesar miles de toneladas por lo que son capaces de transportar cientos y cientos de contenedores.
Estas bestias marítimas requieren una asombrosa cantidad de combustible para atravesar los mares y aunque utilizan combustibles bunker de baja graduación, que contienen mayor cantidad de sulfuro que los combustibles tradicionales, cada año se incrementa drásticamente el consumo, lo que genera un impacto en la naturaleza.
La estrategia de muchas firmas ha sido juntar dinero para la investigación de nuevas tecnologías con la esperanza de mejorar la situación climática. Ciertos organismos regulatorios están creando nuevas normas que regularán la cantidad de combustible que se utilizará.
Existen fabricantes que ya están desarrollando versiones ecológicas de buques con la intención de agregarlos a las flotas presentes. Se trataría del concepto de paneles solares que propulsarían los motores, sin embargo todavía no hay tecnología suficientemente avanzada para proveer la energía necesaria.
Se espera que en los próximos años este diseño pueda llevarse a cabo en la realidad lo que sería un progreso necesario, no solo para la industria de carga sino que también para el medio ambiente.